Uno de los principales
festivales dentro del metal a nivel europeo es sin duda el Hellfest, que se
celebra en Clisson, muy cerca de Nantes en Francia. Para algunos supera al
mítico Wacken, pero al menos compite con un cartel del máximo nivel. Coincidiendo
con el Graspop Metal Meeting, suelen compartir gran parte del cartel entre
belgas y franceses, aunque este año una de las joyas de la corona, Iron Maiden,
cayó del lado belga, aunque para gustos los colores o, en este caso, las
bandas.
En lo relacionado con el festival propiamente dicho, en este 2016 ha habido algunos cambios, mejoras y novedades. Desde el punto de vista de la diversión del personal, sin duda, la tirolina instalada a lo ancho de los dos escenarios principales. Con un par de latas de Redbull te daban un rasca para participar en un sorteo, pero según nos contaban, siempre tocaba, así que todo el mundo feliz, la parte menos buena, las largas colas que se formaban para poder acceder al punto de lanzamiento, pero me temo que eso, las colas, ya son cosas habituales. Cubrir por completo, ya el año pasado había parte, todo el suelo con césped evita que se formen grandes cantidades de polvo, algunos todavía sufrimos las de 2014.
En lo relacionado con el festival propiamente dicho, en este 2016 ha habido algunos cambios, mejoras y novedades. Desde el punto de vista de la diversión del personal, sin duda, la tirolina instalada a lo ancho de los dos escenarios principales. Con un par de latas de Redbull te daban un rasca para participar en un sorteo, pero según nos contaban, siempre tocaba, así que todo el mundo feliz, la parte menos buena, las largas colas que se formaban para poder acceder al punto de lanzamiento, pero me temo que eso, las colas, ya son cosas habituales. Cubrir por completo, ya el año pasado había parte, todo el suelo con césped evita que se formen grandes cantidades de polvo, algunos todavía sufrimos las de 2014.
Pero sin duda la mayor mejora
vino en la zona del escenario Warzone, que para muchos se considera un festival
dentro de un festival. Se ampliaron las barras de bar, se eliminó el cuello de
botella que se formaba al acceder al escenario, aunque por desgracia, en los
momentos de los grupos grandes era muy complicado moverse por esa zona, aunque
eso es tónica habitual en Hellfest. Ambientado como si fuera una prisión, y con
unas gradas en forma de anfiteatro en frente del escenario, sin duda la Warzone
es uno de los grandes atractivos del festival. Con motivo del fallecimiento de Lemmy,
se erigió una estatua en su honor en la Warzone. Monumento que fue visitado por
Phil Campbell el sábado 18.
El resto de atracciones, como
la noria siguen estando, al igual que el bosque, refugio en los días de más
sol, aunque si es cierto que este año hemos tenido más nubes que sol, incluso
cierta cantidad, no mucha, de agua, sobre todo el viernes. Las colas no paran,
ya sea para el bar, baños, etc. Creo que los únicos momentos en los que te
puedes mover con cierta soltura por todo el festival, son las primeras horas de
la mañana, a partir de las 2 o 3 de la tarde se empezaba a poner complicado,
obviamente nada que ver con las 9 o 10 de la noche, en horario de los grupos
grandes, pero se hace un poco complicado desde primera hora casi. Las zonas de
merchandising, haciendo tapón muchas veces en la entrada al foso de los
fotógrafos, pero es bastante entendible, la gente paga una entrada y quiere ver
el concierto donde sea, o pueda, o comprar una camiseta cuando le venga en
gana.
Musicalmente hablando, se
podría encajar como el festival de las despedidas, dos de los tres cabezas de
cartel estaban en su gira de despedida, eso dicen al menos, Twisted Sister y
Black Sabbath.
VIERNES
17 DE JUNIO
Los más destacados del viernes
fueron, Halestorm, con Lizzy Hale es
casi suficiente para levantar a la gente y marcarse un bolazo. Nashville Pussy, previsibles, pero con
mucho rollo, supongo que contar con Ruyter Suys en la guitarra hace que gane
mucho en directo. Havok, thrash en
estado puro en el escenario Altar, contundentes como siempre. Anthrax, con algún problemilla de
sonido debido al viento, pero muy buen concierto en general de una banda con
muchos años de experiencia y con la sensación de que cada año están mejor,
destacar a Belladona y un Charlie Benante que por fin pude ver, ya que en la
última visita le sustituyó el exSlayer John Dette. Melodías pegadizas a cargo
de Turbonegro, puro show. Volbeat, es una de esas bandas “relativamente”
nuevas que suenan como si llevaran décadas, Poulsen y compañía ofrecieron un
show muy práctico, lleno de los temas más populares de la banda, aunque, un
poco descafeinados según impresiones de algún compañero que sigue más al grupo.
El plato fuerte del día eran
los alemanes Rammstein, música,
espectáculo y provocación a partes iguales. Plagado de clásicos y salpicados
con temas menos conocidos en directo como “Hallelujah” o “Stripped”. A
esas horas era prácticamente imposible moverse por casi cualquier zona en la
que hubiera conciertos, ya que la zona del escenario principal se extendía
prácticamente hasta la zona de los escenarios más pequeños en donde Testament coincidía en hora, punto en
contra para la organización quizás. En general muy buen concierto de los
americanos que hicieron un show basado en sus dos últimos trabajos.
Abbath,
tuvieron problemas técnicos que les obligaron a parar la actuación, pero se
repusieron y acabaron sobreponiéndose y firmando un muy buen concierto. The Offspring, con vitola de casi
cabeza de cartel, me parece una banda correcta, pero que podría haber tocado
por la tarde perfectamente, cambiado la hora con Anthrax por ejemplo. En cuanto
al concierto propiamente dicho, sin sobresaltos, cargado de temas clásicos, que
los tienen y poco más.
Cerró la noche Tremonti, que por motivos logísticos no
pudo llegar a Francia por la mañana y le pasaron a última hora de la noche, a
mí personalmente me gusta bastante, sobre todo como guitarrista, cantando es
bastante normal, pero como tampoco creo que aspire a ser Myles Kennedy, pues
nos quedamos con su bolo cargado de riffs y temas potentes. Por tema de
horarios y coincidencias, me hubiera gustado ver a Vader, Killswitch Engage y Kvelertak… pero no
pudo ser.
SÁBADO
18 DE JUNIO
El sábado comenzamos con Crobot, realmente buenos, tanto la
banda, el rollo que tiene en el escenario, como las luces del Valley, se juntó
todo. Puro hard rock. Aunque si hablamos de hard rock, deberíamos de referirnos
a “La Voz del Rock”, como le llaman a Glenn
Hughes, conciertazo sin duda. Repasando temas de su etapa en Deep Purple
como “Stormbringer”, “Mistreated” y “Burn” o temas en solitario y de otros
proyectos como “Soul Mover” o “Black Country”.
Black atmosférico a cargo de Dark Fortress, dieron un buen
concierto. Uno de los más esperados eran Sixx
A.M., la banda capitaneada por el ex Motley Crue, Nikki Sixx. Traen una
descarga muy melódica, para mi demasiado, solo tenían interés los temas de los
primeros discos. Uno de los triunfadores de la jornada y por extensión del
festival, fueron Foreigner,
celebrando los 40 años de carrera, dieron una auténtica lección de AOR con
temas como “Juke Box Hero”, o la archiconocida “I Want to Know What Love Is”.
Si al principio decía que Hellfest 2016 podría ser como el festival de las despedidas
por Twisted Sister y Black Sabbath, también se podría añadir que fue una gran
reunión de voces, como Hughes, Belladona y Kelly Hansen de Foreigner.
De vuelta a los escenarios
pequeños con With the Dead, ritmos
lentos y graves que hicieron que su concierto supiera a poco. Otros que estabas
de aniversario eran los neoyorquinos Sick
of it All, 30 años nada menos, descarga de hardcore, sin parar de moverse
en todo momento y setlist plagados de clásicos de la banda. Turno para un guitar
hero de siempre, Joe Satriani hacía
su aparición en el Mainstage 1. Cuanto menos un poco extraño, quizás no
encajaba en el festival por mucho que seas uno de los guitarristas más
reputados, unido a Marco Minnemann y Bryan Beller, que no es poca cosa, pero
temas instrumentales, por muy bueno que seas, la sensación general es que bajó
la intensidad en la gente.
El ánimo de la gente subió de
nuevo con Disturbed, apostaron por
los clásicos, pero también por un puñado de versiones y colaboraciones en el
escenario, por ejemplo, Nikki Sixx y DJ Ashba para hacer “Shout to the Devil”
de Motley Crue, Glenn Hugues también se unió a la banda, que también hicieron
“Killing in the Name” de Rage Against The Machine y su más conocido “Sounds of
Silence” de Simon & Garfunkel. De vuelta a la Warzone con unos clásicos del
punk, Bad Religion, dieron un
conciertazo, otros que llevan otros 30 años encima de las tablas con su punk
combativo, dejaron al público roto.
Mientras tanto en el escenario
principal, Within Temptation, el
rato que les vi me gustaron, pero Sharon tuvo un despiste considerable al
comenzar “Faster”, que hizo que los que conocíamos la canción nos miráramos
unos a otros con cara de “¿Qué ha pasado?”. Quitando ese pequeño apunte, cabe
también destacar que Tarja se unió a la banda en el escenario. Una de las
primeras bandas del grind, Terrorizer
ofrecieron una descarga antológica, a pesar de que solo permanece Pete Sandoval
a la batería de su formación original, el concierto fue aplastante.
De vuelta para ver en la gran explanada
algo de Bring Me The Horizon, la
única banda que tuvo un retraso “considerable”, unos 10 minutos, creo que no
era de extrañar que si hubiera habido alguna banda con retraso hubieran sido
BMTH. En cuanto al concierto, ya tienen un público, gran parte femenino,
totalmente entregado, así que les da igual si canta bien o mal el amigo. Al
menos estuvo simpático bajando al foso a saludar a todo el que podía y se
acercaba, un detalle. Esto contrasta un poco con las malas formas con las que
abandonaron el escenario, seguro que debido a que les cortaron el tiempo por
haber empezado más tarde. Tiene toda la pinta que en Hellfest, los horarios son
para todos, me parece perfecto. En el Temple, donde no entraba nadie más, metal
épico a cargo de los irlandeses Primordial,
de nuevo se optó por lo seguro en la elección de temas, los más clásicos.
El cabeza de cartel de la
jornada del sábado corría a cargo de Twisted
Sister. Como siempre fiesta continua, heavy, rock o como quieras llamarlo a
raudales. Con un público total y lógicamente entregado a Dee Snider y los
suyos. Mención al batería y/o músico con más bandas a sus espaldas. Mike
Portnoy se unió en la gira de la banda después del fallecimiento de A.J., pero,
lo que para mí era un aliciente más. En cuanto a los temas, qué decir, clásico
tras clásico, “I Wanna Rock” y “We’re not Gonna Take” no solo son clásicos de
una banda, sino auténticos himnos del metal. En la parte final del concierto,
se unió Phil Campbell para hacer un emotivo “Born to Raise Hell” de Motörhead.
Conciertazo en todos los aspectos, tanto musical, como de actitud de la banda,
pequeño speech sobre terrorismo incluido.
Después de Twisted Sister, Campbell
dijo unas palabras a modo de recuerdo a Lemmy y luego se proyectó un video
homenaje de unos 45 minutos y fuegos artificiales. No creo que fuera el
momento. Me hubiera parecido más correcto hacerlo o bien al final del último
concierto de la jornada o del festival, pero bueno, sea como fuere, emotivo y
merecido como no podía ser de otra manera.
Cerraron la jornada en el
escenario principal una de las bandas más representativas, del metal moderno,
los americanos Korn, con la
formación clásica desde 2013 con la vuelta de “Head”, salvo la batería que la
ocupa Ray Luzier desde 2007. Korn es una banda que, si están normal, son muy sólidos
en el escenario, contundentes, y si como fue el caso, eligen temas correctos,
hacen que la gente no pare de saltar o mover la cabeza como hace Jonathan Davis
durante todo el concierto.
DOMINGO
19 DE JUNIO
Comenzamos la jornada del
domingo con Fallujah, para la banda
era el primer desembarco en un festival continental. Los americanos apuestan
por un death metal con tintes técnicos y tuvo buena respuesta de la gente que
estaba en el pequeño de los escenarios. Una de las bandas más llamativas era
sin duda The Vintage Trouble, se
dieron a conocer en nuestro país por telonear la última gira de AC/DC. Ty
Tayler es otro de los grandes vocalistas y frontman, que pasaron estos tres
días por Clisson. Mucha fuerza en su rock soul que hizo que la gente vibrara
con los de Los Ángeles. De nuevo en el escenario Altar para ver a The Skull, doom metal con toques más heavys.
Uno de los grupos principales, no por el horario, si porque es uno de los más
internacionales, sino el que más, del país vecino, es sin duda esos son Gojira. Cuando un concierto pasa rápido
es buena señal habitualmente, así, con la fuerza de los hermanos Duplantier y
compañía, desde el principio con temazos como “Toxic Garbage Island” u “Only
Pain”.
Con bastante dificultad ya
para moverse entre la gente y eso que aun empezaba la tarde, comenzaron Blind Guardian, posiblemente el grupo
más representativo del power metal alemán, junto a Helloween. Hansi Kürsch
haciendo cantar a todo el mundo “Bard’ Song” sin dejar clásicos como “The
Script For My Requiem” o “Mirror Mirror”. Conciertazo, la verdad, a cargo de
los teutones. Amon Amarth
desplegaron un par de dragones en el escenario en donde Johan Hegg se subía y
bajaba a modo de escaleras. Los suecos presentaban trabajo en el Hellfest, Jomsviking, pero
no dejaron atrás los mejores temas de su discografía, disfrutando además de un
gran sonido para hacer terminar un concierto redondo.
La cosa en este punto se ponía
seria. Slayer es una banda que por
mucho que la vea, no me suelo cansar de verla. Bostaph, Holt, Araya y King, por
separado me parecen brutales, juntándolos hacen que cualquier banda que toque
antes o después de ellos y que pretendan ser duros es posible que queden en
evidencia si se compara con los veteranos capitaneados por Tom Araya. Algún
tema de su último disco, “Repentless” suena muy contundente al igual que “You
Against You”, de ahí a los clásicos, poco que decir, “War Ensemble”, “Angel Of
Death”, “Dead Skin Mask”… vienen, destrozan y se van. Turno para otros mega clásicos.
Con ciertas dudas por los continuos cambios de formación, la voz de Mustaine,
etc. Creo que Megadeth se marcaron
un concierto realmente bueno. Temas de siempre, como “Holy Wars”, “Tornado”,
“Sweating Bullets” junto con alguno de su último trabajo Dystopia marcaron el ritmo. En cuanto a la voz de Mustaine, poco
que decir, me pareció que sonaba bastante correcta, incluso muy bien, posiblemente
lo único en que se le puede criticar algo, no por lo visto en Hellfest, ya que
como guitarrista me parece brutal.
Para continuar las ganas de
juerga, Farrell, Navarro y los suyos de Jane’s
Addiction fuera de los escenarios principales, en el Valley. Con bailarinas
sobre el escenario desgranando Ritual de
lo Habitual posiblemente su disco más conocido. Otra de las bandas que
tenía muchas ganas de ver y me dejaron con un sabor agridulce. Ghost hiceron un show en el sentido
amplio de la palabra. Monjas, niños a modo de coros, billetes con la cara del
Papa Emeritus lanzados por docenas, fuegos artificiales, etc. ¿Y la música?
Bien, pero para mi gusto demasiado parón, charla y espectáculo para tener un
tiempo limitado al ser un festival. Si lo hacen durante su gira, lo veo
perfecto, pero yo hubiera quitado parafernalia y habría metido algún tema más.
En cualquier caso, lo que tocaron, estuvo realmente bien, más allá de las máscaras,
disfraces y demás, son muy buena banda.
Qué decir de Black Sabbath, es la segunda vez que
tenía la oportunidad de verles en directo, la primera, en el mismo sitio, el
mismo día, creo que, a la misma hora, dos años atrás. El concierto me pareció
casi calcado, creo recordar que en 2014 tocaron “God Is Dead?”, que no lo
hicieron en esta edición, por lo demás, está claro que Ozzy no está para correr
por el escenario e incluso parece que a veces, le cuesta hasta andar, pero en
lo que se refiere a la voz, sin problema, al igual que Iommi o Butler que
apenas se mueven de donde comienzan el concierto, pero musicalmente es como
escucharlos en casa. Me parece un privilegio disfrutar en directo todavía de
una banda legendaria con mayúsculas, aunque su gira “The End” nos hace indicar
que las oportunidades cada vez serán menos. En cuanto a los temas, pues la
tónica del festival, y mucho más en una banda como Black Sabbath, clásicos para
aburrir, “Black Sabbath”, “Children of the Grave”, “Iron Man”, “War Pigs”, “Paranoid”…
Casi llegando al fin, otra
banda, solista con mucha historia, de los de toda la vida. King Diamond, con sus cambios de registro en la voz, puesta en
escena teatral, ofrecieron un gran concierto que fue una gran sorpresa,
agradable, para muchos. Por horarios me hubiera gustado ver a Refused y otra
banda clásica dentro del death metal, como es Deicide, pero, no se puede estar
en todo por desgracia.
Después de tres días sin
parar, desde las diez y media de la mañana hasta las dos de la madrugada, hay
que remarcar que el cumplimiento de los horarios fue exquisito, salvo en alguna
ocasión muy puntual, lo ya mencionado de Bring Me The Horizon, lo que no merece
la pena ni mencionarlo casi, pero dice mucho de cómo trabajaron en la
preparación de los escenarios, teniendo en cuenta la cantidad de bandas que
desfilaron durante tres días. En definitiva, en cuanto a bandas, creo que
Hellfest cumple con las expectativas, pugnando a gran nivel con el resto de
festivales europeos. Sobre la organización, no sé muy bien cómo solucionar, si
se puede que no sea reducir aforo, el exceso de gente en buena parte del
festival, pero tampoco me parece excesivamente grave, a no ser que seas
fotógrafo claro, pero eso es otra historia. El respeto de los horarios me
parece admirable que es una cosa que siempre me molestaba mucho en los macro
festivales españoles y que parece que, a nivel general se ha solucionado
bastante en Francia.
Ya se pusieron a la venta un
número limitado de abonos para la edición de 2017, así que, seguro que dentro
de poco empiezan los rumores… aunque según se comenta, cierta banda que se
acaba de reunir después de muchos años y disputas, no sé si me seguís. Así que
estaremos atentos, que tiene buena pinta la siguiente edición de 2017.
Texto: NC
Fotos: Selene
No hay comentarios:
Publicar un comentario